Lírica Ñandutí, dirigida por el tenor y maestro Miguel Coronel, rescató
Naranjera, una de las zarzuelas paraguayas más representativas del género. La
representación tuvo lugar en cuatro funciones ofrecidas en el Teatro Municipal
de Asunción, el tercer fin de semana de marzo.
Este rescate cultural se produjo 53 años después de su estreno en 1962,
la única vez que se representó en forma completa. Y no sólo fue un éxito de
taquilla, sino también de crítica.
Naranjera, del recientemente desaparecido músico Neneco Norton y el
escritor Alcibiades González del Valle, concebida a principios de los sesenta,
es una obra costumbrista y divertida. Pero además, reivindica el trabajo
femenino (naranjeras), el retorno de los jóvenes de la ciudad al campo, y sobre
todo los naranjales, representativos de la identidad nacional frente a la invasión de cultivos más
rentables, como la soja.
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Se lucieron ampliamente la egresada del Conservatorio Nacional Betania
Báez, y la ganadora de Rojo María José Obregón, que alternaron en el papel
principal, los solistas de primer nivel que las secundaron, y un elenco de más
100 integrantes, entre quienes se cuentan el coro y la orquesta dirigidos por
Manuel Cabral, y el ballet dirigido por Adri Vera. La maravillosa escenografía
de Tessy Vasconcellos, reprodujo fielmente y transportó al público al ambiente
de la época.
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